La Tierra de la gran nube, un siglo de progresos

 Aunque ganase relevancia gracias a los “All Blacks” y ser el escenario de rodaje de El Señor de los Anillos, Nueva Zelanda es a día de hoy una de las naciones que mejor están gestionando la pandemia mundial, llegando a erradicarla, y estar a la cabeza en Índices de Desarrollo Humano.

enlace aquí

    Las islas que en 1642 bautizó un navegante holandés y reclamadas posteriormente por Gran Bretaña, guardan tras de si una larga historia tras de sí. La “Tierra de la gran nube”, nombrada así por el pueblo maorí, comenzó a ser poblada de forma sistemática a partir de 1840 bajo control británico, que pasaron a plena autoridad británica en la misma fecha por el Tratadode Waitangi y estando bajo protección de los mismos, constituyéndose, así como colonia británica. Comenzando a finales del siglo XIX, con una economía fundamentada en el sector agropecuario, siendo las mayores actividades la cría de ganado ovino, mejorando sobre todo por la introducción de buques con capacidad frigorífica que fomentaron la exportación de carne, y la explotación minera, a causa del hallazgo de oro en Otago.

    A principios del siglo XX, Nueva Zelanda lograría mayor libertad frente a la nación británica y donde Pember y Seddon, con influencia de Stuart Mill y de la sociedad fabiana, iniciaron una política que buscase el bienestar de granjeros y obreros neozelandeses, implantando una legislación laboral, aunque generaron mucho rechazo frente a sindicalistas. Aunque el socialismo neozelandés sería muy débil en las primeras décadas del este siglo. Aquí es cuando se produjo la carta de Tregear, secretario de Trabajo kiwi, a un socialista estadounidense, en la cual, este explicaba cómo se estaba trabajando por terminar con los privilegios y tratando de combatir a los propietarios del suelo urbano que alzaban los precios de los alquileres, con la política de compra del suelo urbano y emprender una subida de salarios para lograr que obreros adquiriesen un hogar y construyesen sus hogares, junto a la moderación de la jornada laboral y la salud pública. 

Nueva Zelanda participaría en ambas guerras mundiales en el bando británico, brindando apoyos a Reino Unido en sus campañas en Europa y, sobre todo, durante la Segunda Guerra Mundial en el Pacífico.

enlace aquí

    La depresión de 1930 reveló a Nueva Zelanda como gran dependiente del mercado exterior y llevó a la decisión de potenciar su industria nacional, esta fue tan dura que llevó a la ruina a la mayoría de las granjas y en 1935, un gobierno reformista salió elegido “FirstLabour Government”, volviendo así las exportaciones, con Gran Bretaña como gran mercado de exportación de lana o queso y fortaleciéndose las relaciones con los británicos, al punto de ser una “mina” de futuros trabajadores para Gran Bretaña, por ser en la nación del Pacífico menores las prestaciones sociales y el sistema educativo, aunque el nivel de la clase media fuese más elevado.

    Enorgullecidos por su prosperidad, igualdad y armonía social, aunque muy puritano socialmente hablando con la llegada de la televisión no hasta los años 60´s o la oposición al comercio los domingos, aunque este venía de la convicción de que trabajadores debían descansar los fines de semana.

     No sería en 1947, después de terminar la Segunda Guerra Mundial, que Nueva Zelanda reclamaría una autonomía completa respecto a Gran Bretaña y con ello que Nueva Zelanda, en sus labores de política exterior, tratase de entrelazarse con Estados Unidos, con la firma del pacto de ANZUS en 1951 y sería miembro fundador en la Organización del Tratado del Sudeste Asiático (SEATO) en 1954.

    En 1973, comenzaría a desarrollar mercados alternativos a Gran Bretaña, por centrarse este último en las relaciones dentro de la Unión Europea, y a aumentar su índice de diversidad económica, comenzando a ganar relevancia el turismo en el país y que aumentase la formación de la población.

    En 1984 con el gobierno de David Lange y Roger Douglas, denominado como el Fourth Labour, sería el gran Gobierno reformista con una política económica orientada al libre mercado y propuesta a erradicar las armas nucleares, llegando a negarse a colaborar con Estados Unidos debido a esta razón y que el hundimiento de uno de los buques de guerra les llevase a entrar en tensión en sus relaciones con Estados Unidos y que estos últimos decidiesen suspender sus obligaciones militares con la nación “kiwi” junto a la prohibición de contactos con dicha nación, que terminaría en 1990. Esta posición frente a las armas nucleares sigue siendo muy fuerte a día de hoy.

    Nueva Zelanda no ha estado exenta de reivindicaciones por parte de los maoríes, tras el masivo desplazamiento de este pueblo que en los 80´s suponía de más del 80% de este grupo en el entorno urbano, lo que le llevó a que en 1989 se formase un comité propio del Gobierno para analizar dichas quejas, que reivindicaban el 70% de los territorios y la mitad de los derechos de pesca). En 1996, el Gobierno establecería un acuerdo para compensar la confiscación ilegal de las tierras realizada a la tribu Waikato Tainui en 1860 de $ 170 millones, que incluyó también una disculpa de la propia de la Reina, y que los maoríes reclamasen la mayoría de los recursos naturales llevó a que el Gobierno expresase su compromiso con metas en favor de beneficiar a estos y a cerrar la brecha de sueldos entre maoríes y el resto de la población

enlace aquí

    En la década de los 90, se produjo un cambio en la inmigración basándose en la situación mas multicultural de la nación, llegando mayor cantidad de asiáticos o africanos y no tantos británicos como antaño. En 1996, el Gobierno de coalición de James Bolger presionó para la instauración de una república, encontrándose con la oposición del público general. Ya que a día de hoy la Reina Isabel II de Reino Unido continúa siendo la monarca del territorio, a pesar de la independencia de Reino Unido.

    En la época contemporánea, el país está dirigido por Jacinda Arden, con un gobierno de coalición entre los laboristas y el NZ First, la cual se enfrenta a crisis como la de la vivienda, el aumento en los gastos en educación y sanidad, consagrándose en un período de grandes reformas.

    Actualmente su estructura de Producto Interior Bruto se forma en dos terceras partes por actividades propias del sector servicios y teniendo por gran destino de exportación a China o Australia, estas exportaciones son en su mayoría de productos agrícola como leche en polvo o queso.

    Con la situación de la crisis sanitaria, Nueva Zelanda se ha mostrado a nivel internacional por llegar en momentos de la pandemia a reducir en gran medida, en algunos momentos incluso a eliminar, la presencia del Covid-19.

    A continuación un vídeo sobre la situación actual neozelandesa: